LA CONSPIRACIÓN DE NOVIEMBRE
Hoy me gustaría hablar de esos actores que se encasillan en un papel y que por mucho que lo intenten, haciendo otro tipo de personajes, no logran salir de ese pozo sin fondo.
Y es que Pierce Brosnan no puede hacer de seductor a secas, ni mucho menos meterse en un musical, de verdad Pierce, espero que quién te propuso hacer Mamma Mia hoy esté atendiendo en un puesto de perritos calientes en Wall Street.
Pierce Brosnan se mueve mejor en esas películas estilo James Bond, de espias, conspiraciones... he de reconocer, que para mi siempre será James Bond, cada generación tenemos el nuestro y a mi me tocó este elegante irlandés.
La película no da para mucho, si esperáis a verla en televisión hacéis bien, ya que gastar el dinero en una entrada para ver esto... es perderlo.
Típica película de conspiraciones, un juego entre CIA y KGB, pero en nuestros días. Un político ruso con un pasado manchado por las guerras y las atrocidades que se presenta a la presidencia de Rusia, mientras que la agencia americana quiere descubrir sus trapos sucios.
Y aquí esta nuestro querido Brosnan al que una vez jubilado, lo recuperan para que saque a una espía del Kremlin. Por lo que se verá enfrentado tanto a los rusos como a los americanos, entre los que se encuentra un antiguo alumno suyo.
Nos os hablo de los demás actores, simplemente destacar a la bella Olga Kurylenko y a Luke Bracey que pone el musculo en la película, pero que realmente no aportan demasiado.
Película de domingo por la tarde para rememorar aquellas escenas de 007 disparando y rodeado de mujeres hermosas, poco más.
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